23 de abril de 2013

Odio

Oh primavera de las amapolas,
tú que floreces para bien mi casa,
luego que enjoyes las corolas,
pasa.
Beso, la forma más voraz del fuego,
clava sin miedo tu endiablada espuela,
quema mi alma pero luego
vuela.
Risa de oro que movible y loca
sueltas el alma, de las sombras, presa
en cuanto asomes la boca,
cesa.
Lástima blanda del error amante
que a cada el paso el corazón diluye,
vuelca tus mieles y al instante
huye.
Odio, tremendo como nada fosco
odio, que truecas el puñal de la seda
Odio, que apenas te conozco,
queda.

17 de abril de 2013

170413

Hay palabras que no guardo,
que se convierten en papel,
que se convierten en tumbas,
que se diluyen con las paredes.
Hay palabras que no entiendo, que son tu nombre.
Palabras que no pude inventar, que son las tuyas.
Palabras que no son tales;
que describen
la dualidad constante del mundo y tus manos
la sinonimia de tu cuerpo y el mío
la distancia entre mis ojos y las estrellas
la cadencia de la respiración de la vida
el silencio incorrompible de la ausencia
los umbrales inmaculados de nuestro jardín
la escoria intrínseca del espíritu que nadie quiere ver.
Palabras que gritan en la cara de la indiferencia que nadie quiere escuchar,
que se retuercen en el inconsciente colectivo sin que nadie las sueñe nunca,
palabras que encarcela el sinsentido,
que tortura la decadencia,
palabras que me persiguen;
palabras que jamás voy a saber decir.

2 de abril de 2013

020413

No entiendo, no entiendo cómo funciona la realidad, 
o al menos no entiendo por qué funciona así,
no entiendo cómo esos conceptos
se convirtieron en lo que son más allá de su abstracción 
y se volcaron al mundo de esa manera, no quiero pensar de esa forma,
no quiero perdurar en este lugar, no quiero estar encerrada en el aire, 
no quiero que nadie se les acerque, 
no puedo hacer otra cosa que odiarlos a ellos
con la misma intensidad con la que los quiero a ustedes.

25 de marzo de 2013

250313

Acercarse al centro, al principio, la razón de ser,
el trasfondo que encausa cada instante de la mente, de la luz
para ascender, verticalmente, fundirse en el infinito a consciencia
convivir la realidad como fracción del todo y no
desvirtuarlo en una fracción de lo real.
Nada puede interpretarse en lo precario de la racionalidad.
Todos están tan lejos y yo estoy
sola con mis respuestas en esta torre de superficialidad
todos están ciegos y no puedo hacer más que contemplarlos
y sentir su vacío
como si me perteneciera.

12 de febrero de 2013

120213

Estoy en una secuencia tan enorme y tan completamente coherente que ni siquiera deja espacio al shock. Nada jamás tuvo tanto sentido partiendo del hecho de que tal idea se retroalimenta a sí misma y subsiste de esa manera haciendo que todo funcione a la perfección y que nada quede afuera.
Ni siquiera puedo sorprenderme porque yo también soy eso.
Cuando todo cierra, cuando el conflicto no es tal, cuando no hay una sola partícula en el universo que no tenga una causa y un fin y un enfoque y todo eso sea armonía en cada uno de sus instantes,
ahí está el Principio.

23 de enero de 2013

Tal vez lo más suicida sea decirte la verdad
Preferí callar, a esta hora de la vida es lo mejor.
Llega la noche, respiro libertad, 

respiro libertad y no miento.
Siento que pasan los días, 
y sigo adelante 
tracción a sangre tras una melodía.
Y creo que te hice tan mía que por un instante te olvidé .

22 de enero de 2013


Ya al traicionar a su padre, la vida apareció ante ella como un largo camino de traiciones, y cualquier traición nueva la atraía como un vicio y como una victoria, ¡No quiere permanecer en sus filas! ¡No quiere  permanecer en esas filas siempre con la misma gente y las mismas conversaciones! Por eso la excita tanto lo injusta que es. La excitación no le resulta desagradable, al contrario, Sabina tiene la sensación de haber vencido y de ser aplaudida por alguien invisible.
Pero inmediatamente después de aquella embriaguez llegó la angustia: ¡Este camino tiene que terminar en algún sitio! ¡Alguna vez tiene que dejar de traicionar! ¡Algún día tiene que detenerse!
Era de noche e iba de prisa por el andén. El tren para Ámsterdam ya está en la estación. Buscaba su vagón. Abrió la puerta del compartimiento hasta el cual la había conducido un amable revisor y vio a Franz sentado en la cama, que ya estaba hecha. Se levantó para darle la bienvenida y ella lo abrazó y lo cubrió de besos.
Tenía unas ganas terribles de decirle, como la más trivial de las mujeres: ¡No me abandones, no dejes que me vaya, dómame, esclavízame, sé fuerte! Pero eran palabras que no podía y no sabía pronunciar.

Adorar a Kundera por sobre todas las cosas!

5VIII20

Cartografiar el vínculo reclama deconstruir la noción que se oculta en el verbo tener. Vínculo como categoría supraordenada a yo a la s y la...