Oh primavera de las amapolas,
tú que floreces para bien mi casa,
luego que enjoyes las corolas,
pasa.
Beso, la forma más voraz del fuego,
clava sin miedo tu endiablada espuela,
quema mi alma pero luego
vuela.
Risa de oro que movible y loca
sueltas el alma, de las sombras, presa
en cuanto asomes la boca,
cesa.
Lástima blanda del error amante
que a cada el paso el corazón diluye,
vuelca tus mieles y al instante
huye.
Odio, tremendo como nada fosco
odio, que truecas el puñal de la seda
Odio, que apenas te conozco,
queda.
23 de abril de 2013
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
5VIII20
Cartografiar el vínculo reclama deconstruir la noción que se oculta en el verbo tener. Vínculo como categoría supraordenada a yo a la s y la...
-
Vida mía, cómo vivirte a cada instante oscilando todo el tiempo entre el ser y el observar. Quiero abrazar entera cada hilo del destino q...
-
Estás pegado a mis sueños asi como yo estoy pegada a tu imagen trastocada te convierto en el exponente lo que me impulsa a dormir y a des...
-
I do my thing and you do your thing. I am not in this world to live up to your expectations, And you are not in this world to live u...
No hay comentarios:
Publicar un comentario