13 de mayo de 2011

Me siento a verme, cómo el tiempo me atraviesa
como el mundo gira fuera de mí.
Seguro que no puedo llegar, desde mis pupilas
hasta cada una de mis costillas pulverizadas por el peso de lo que no existe?
Recorrí mil veces el camino y estoy segura que al hacerlo
no sé dónde está el sur y dónde sus ojos.
Y despertarse en una esquina perdida, o en el fondo del mar o en un colchón ajeno
y sentirme mínima y olvidada por el mundo y por vos
y no saber dónde está mi casa
y no saber dónde está tu sombra
es la piedra angular de cada segundo.

No hay comentarios:

5VIII20

Cartografiar el vínculo reclama deconstruir la noción que se oculta en el verbo tener. Vínculo como categoría supraordenada a yo a la s y la...