25 de abril de 2011

Bueno, después de todo este tiempo, finalmente me decís algo que me gusta escuchar, que me hace bien que venga de vos. O sea, me da la sensación de que, sea por casualidad, porque crecimos, nos conocemos, lo que sea, de alguna manera, coincidimos. Ni siquiera pensé que pudiéramos llegar tan espontáneamente a este momento. Es genial querer lo mismo, posta.
Sobre todo por el hecho de que jamás se me cruzó por la mente el hecho de que fueras diferente, porque me encanta que seas quién sos. Me encanta que no haya nada que falte, me encanta que las cosas estén claras, me encanta saber qué queremos y qué no tenemos que querer, qué no es necesario querer.
Me encanta que me hables como me hablás. Me encanta que nos pase lo mismo.
Me encanta saber que no estoy en la misma de siempre. Me encanta que ambos tengamos el mismo nivel de interés sobre el otro. Me encanta entenderte. Me encanta hablarte. Me encanta ocupar tu mente.
Me encantás.

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