31 de agosto de 2010

Vos.

Vos, que vas y venís a gusto y placer.
Vos, que vivís una vida superficial y sin sentido.
Vos, que no te das una idea remota de la falta que me hacés.
Vos, que vas por ahí creyendo que tenés todo (tal vez lo tengas)
Vos, que pasás por la vida sin pena ni gloria,
Vos, que como buen ciego no notás tu ceguera,
Vos, que nunca tuviste la capacidad de escucharme;
Vos, que das vuelta mi mundo con una mirada.
Vos, que no distinguís Europa de Asia,
Vos, que creés ser feliz,
Vos, que te conformás,
Vos, que nunca quisiste siquiera imaginar lo que podías tener,
Vos, que nunca supiste lo que podías dar;
Vos, que no ves que acá estoy yo esperando,
Vos, que no sabés lo que duele esta espera,
Vos, que seguramente nunca vayas a saberlo;
A vos, con tu universo de inconsciencia,
A vos, al que quise como a ninguno,
A vos, dejame decirte: Te extraño. Te necesito. Pero me cansaste.

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